Pau Roca, secretario general de la Federación Española del Vino, informa que unos cien contenedores de vino de procedencia europea “están parados” en Sanghai por “barreras técnicas”, aclara que entre los afectados se encuentran empresas españolas.
El pasado martes, 12 de noviembre durante la formalización del protocolo de adhesión (ACEVIN) al programa europeo “Wine in Moderation”, el secretario general responde que “los contenedores de vino inmovilizados es por causa de la detección de “residuo seco” en algunas partidas. Hecho incompresible, pues son de procedencia distintas.
Supuestamente, esta circunstancia nada tiene que ver con la práctica de “antidumping” y antisubvención que se libra ahora en China ante empresas de Europa que trabajan en el mismo sector.
Pau ha anunciado que el próximo viernes 15 de noviembre, se comenzarán conversaciones para un proceso “business to business” en Pekín, para hallar un remedio a la situación que acontece y prevenir mayores sanciones a las empresas afectadas.
Las compañías españolas están asesoradas, según Pau Roca, por un despacho de abogados que responde ante la FEV y autoridades de comercio españolas. Se pretende “eliminar cualquier posibilidad de que haya medidas transitorias” desde China. Según Roca, no se pueden dar medidas restrictivas que perjudiquen a la campaña de navidad y la exportación de las bodegas españolas en estas fechas. El secretario general es consciente de que se sufre una “desproporción de intereses” originada por los paneles solares (con lo que se comenzó la disputa entre Europa y el Gigante rojo). Además de ello, para empeorar la situación, hay “nubarrones con el sector de la telecomunicaciones” que podrían interponerse en las conversaciones.
Roca ha defendido que en el sector vinícola “no queremos ser rehenes de otras guerras comerciales” y además “la comisión europea debería ser la primera en apoyarnos”. Destaca que la OCM “tenga mecanismos de defensa comercial”. “No podemos conquistar mercados sin tener protecciones”, hecho que ha ocurrido en casos anteriores. Defiende enérgicamente la protección de los intereses comerciales del sector vinícola, pues concentran más relaciones flujos comerciales que otros como el azúcar.